Crónica de una noche buena
Punto de vista familiar!!
Las 18h de la tarde de un 31 de diciembre. Las matriarcas de las familias, ya hace horas que preparan los manjares que se degustaran en las cenas familiares, acicalando a la vez las mesas.
Las 18h de la tarde de un 31 de diciembre. Las matriarcas de las familias, ya hace horas que preparan los manjares que se degustaran en las cenas familiares, acicalando a la vez las mesas.
Y una vez te sientas en la mesa sobre las 21h, comentas con la familia un sinfín de peculiaridades inusuales diariamente, es cuando surgen las conversaciones más dispares, los chistes más graciosos, las risas caldean el ambiente, y mucho tendrá que ver las copitas de vino que nos tomamos y tanto nos gustan.
Entre plato y plato, y ya dando las 23h, te das cuenta de
que estás viendo en la tele lo típico de todos los canales, y es que hay que
preguntarse, ¿Qué sería de una noche vieja, sin las galas de fin de año?, ningún
canal se libra de los típicos especiales, nada que ver con los de navidad, ya
que están cargados de actuaciones y humoristas intentando amenizar nuestra
velada.
Cuando era pequeño, me pensaba que los canales de
televisión se comunicaban entre sí, con puertas en sus pasillos. Si abrías una
puerta, estabas en la primera, la otra puerta, la segunda televisión y luego al
llegar Telecinco y Antena tres pues lo mismos, y todo para que les diera
a tiempo a los artistas a salir en todos los canales, que imaginación la mía. Años después fue cuando caí en la cuenta de
que esta todo grabado. Ahora ya pierde la chispa. Pero entretener, entretiene.
Al dar las 23.50h
te das cuenta de que ya está Ramón García
con su elegante y apolillada capa, en los balcones del corte inglés, justo
enfrente de la puerta del sol, junto a la preñadísima Ane Igartiburu, avisando
de que primero van los cuatro cuartos y luego empiezan las doce campanadas. Y tienes
que dejar de comer porque te pillo el tren y no dio tiempo ni a preparar los
postres, pero no pasa nada, después de las campanadas lo preparamos todo.
Punto de vista entre amigos!!!
Son las 20h de un 31 de diciembre, y aun no te has preparado la ropa para esta noche. Si eres mujer con un poco de suerte tendrás varios modelazos preparados, por eso de que al último momento te dé por cambiar el look. Y tendrás un hueco para hacerte las uñas. El peinado irá acorde con el atuendo, así que hasta el final no sabrás que ponerte.
Son las 20h de un 31 de diciembre, y aun no te has preparado la ropa para esta noche. Si eres mujer con un poco de suerte tendrás varios modelazos preparados, por eso de que al último momento te dé por cambiar el look. Y tendrás un hueco para hacerte las uñas. El peinado irá acorde con el atuendo, así que hasta el final no sabrás que ponerte.
Las 22h, y llegas tarde al restaurante. Cenar en un restaurante es frio, poco navideño y caro, pero la comodidad tiene un precio estos días. Y cabe pensar que por una noche al año no hace daño, pero si bacía el bolsillo.
Son las 23.50h y ya hemos engullido todo el manjar. No se sabe ni como nos van a entrar las 12 uvas.
Fusión de los puntos de vista!!!
Son las 00.01h, todos somos uno, ya no hay distinción
entre el punto de vista familiar o entre amigos. A todos nos ocurre lo mismo,
el móvil se colapsa, no hay cobertura, no hay línea y utilizamos la re-llamada
como arma de defensa. Todo esto si no nos hemos atragantado con las uvas, porque
siempre algún gracioso te hace reír justo cuando está dando la quinta
campanada, por lo que llegar a la numero doce se hace interminable.
Después de una larga hora, por fin es la 01h.de la
madrugada, y empieza la fiesta, no importa si acabaste o no de cenar, lo que
verdaderamente importa, es que la copa nunca esta bacía. Es justo cuando empiezan las fotos con los Smartphone
de última generación. Las líneas telefónicas se recuperan, pero con las nuevas tecnologías
y las redes sociales se paraliza el mundo, colapsan los datos de nuevo y otra
vez los móviles jodidos.
Mi reflexión y con lo que yo me quedo esta noche es con
la ilusión de disfrutar de una noche mágica, en la que todo cabe, lo peor de
todo es despertarte al día siguiente, a saber en qué condiciones, y con un
resacón divino, del que no podrás dejar
de recordar en varios días. Pero esto podría ser aún peor, podrías
despertar y darte cuenta de que pasaste
la noche lamentándote en la cama porque te sientes solo y no tienes con quien
compartir estos días tristes, sintiéndote deprimido/a y todo es porque finges
que no te gustan las navidades, cuando en realidad eres infeliz por algún trauma
del que sólo tú puedes salir.
Sea por el motivo que sea, tendrías que levantarte de esa
tristeza y lanzarte a la calle a buscar a algún amigo y alimentar esa amistad
para que nunca te falle y siempre poder disfrutar de ellos, como si fuera cada día una constante
noche de fin de año. Pero sobre todo en nochevieja es cuando más tienes que depender
de tener unos buenos amigos con los que compartir buenos momentos.
Pero la navidad continua, hasta el día de Reyes, que en
tan solo unos días estarán aquí para acabar de rematarnos con más comilonas,
arriba las kilocalorías y si consigo no reventar de los excesos, contare la crónica
también, mi reflexión sobre los regalos y demás. Pero eso será en otro post, de momento espero
que este os guste.
Quedaros con todo lo bueno de la nochebuena y disfrutar
de una buena entrada al año 2016. Espero y deseo que todos los deseos y
proyectos se cumplan, yo los tengo y son muchos, no los voy a contar para que
no se gafen. Pero empiezo el año con ilusiones diversas. Ahora solo toca
cumplirlas. Yo, se las pediré a Baltasar que él me lo trae siempre todo.
Lo importante
es NO PERDER LA ILUSION.
by Dany Lomas
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